“un menú muy complicado”
JR logro el menú perfecto en
un equipo acostumbrado al cabaret. Puede sonar
una frase hecha pero uno de los méritos del DT fue mantener a todo el
plantel motivado, porque si bien trato de repetir el 11 titular todo lo que
pudo, las distintas contingencias lo
llevaron a tener que echar mano de todos los integrantes del plantel. No solo manejando los minutos en cancha sino también
convenciendo a jugadores a cumplir funciones que no estaban acostumbrados a
realizar dentro de la cancha.
Ejemplos claros son los de Esteban que dejo de ser volante de
banda para convertirse en 5 tapón o Sergito que termino jugando unos metros más atrás aportando
y orden táctico, además de su habitual panorama. O Manu que de 8/7 paso a
destacarse como lateral derecho.
El equipo también gracias al
plantel largo evito expulsiones. Acá JR fue implacable, jugador con amarilla y
riesgo de roja, automáticamente era remplazado sin piedad. No importaba su
nombre ni su importancia en el partido. El DT así logro que el equipo casi
siempre termine con los 11 en el campo. Uno de los reclamos históricos que
se le hacían a un plantel bastante
cuestionado por su indisciplina. Rolo en esta faceta quizás fue el más
castigado pero las victorias evitaron las caras largas.
El aporte del banco permitió
sostener un ritmo de partido regular, de
ser un equipo que en los últimos 15 minutos sufría una merma física importante,
paso a ser un equipo que nunca dejo de batallar
los partidos e incluso llego a contar con más opciones que el rival. Hasta
algunos partidos el banco era tan largo que no todos los
suplentes podían ingresar. Recordemos que en Lafo son 4. Para un equipo que no
siempre tiene a sus integrantes en su mejor forma física y que ya está bastante
entrado en años, la profundidad del
plantel se convirtió en algo indispensable.
Otra ventaja que trajo esto fue la competencia por los
puestos. JR consiguió que nadie se sienta titular indiscutido. Así nadie se quedo en su zona de confort y todos se
mataron por estar en el 11 inicial o
no ser cambiados durante el partido. Aca
los ejemplos mas claros fueron la lucha por los puestos de lateral y los volantes por las bandas.
Por ultimo en esta faceta queda por destacar el impacto de
los cambios en el cierre de los partidos. Acá el más destacado fue la zaeta rubia JM
autodenominado como el tataranieto del viento por su espectacular jugada a lo Caniggia.
De ser el Emiliano del técnico paso a convertirse en un jugador de impacto quizás
sin muchos minutos pero con una eficiencia y eficacia envidiables. TO BE CONTINUED…..
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